La ejecución efectiva de las funciones que destacamos produce beneficios que mejoran la productividad y rentabilidad del departamento legal, permitiendo al equipo aportar su valor al negocio:
- Las operaciones legales ayudan a dar forma a las áreas de enfoque para el departamento y definen áreas de mejora a corto y largo plazo.
- La introducción de métricas y KPIs permite medir y comparar estas áreas de enfoque.
- Evitan distracciones con la práctica del derecho, permitiendo enfocarse en elevar el perfil de lo legal y su valor para el negocio.
- Se logran relaciones más sólidas, transparentes y basadas en datos con proveedores externos para maximizar el valor y construir asociaciones más estratégicas con asesores externos y proveedores de servicios.
- Ayudan en la estandarización y automatización de tareas repetitivas o administrativas, como revisión de facturas o contratos, para que el equipo pueda dedicar más tiempo a trabajos de alto valor.
- Permite el uso constante de la tecnología y aplicación de procesos que integren sistemas más amplios para el análisis estratégico en toda la empresa.
- Facilitan la valoración del personal basada en datos según el tipo de trabajo realizado, permitiendo incluso diseñar una carrera en función de elementos variables y de la aportación de cada abogado.