Las distintas recesiones económicas de las últimas décadas han contribuido sin duda a incrementar la tendencia del «hacer más por menos». Para abordar este reto, muchos departamentos legales empezaron a aumentar la carga de trabajo de sus profesionales ya contratar a más abogados internos. Paralelamente, las asesorías jurídicas de empresa empezaron a diseñar planes de implementación tecnológica, especializándose en Legaltech, que ha venido optimizando las operaciones legales en diversas áreas.
La mejora de los flujos de trabajo y la automatización de procesos, así como de documentos, son importantes dentro del conjunto de innovaciones tecnológicas por el incremento de eficiencia aportada a la asesoría legal. A su vez, la estructuración de procesos y documentos ha permitido abordar un mejor y más rico análisis de datos, lo que permite la generación de KPIs y métricas mucho más concretas.